¿Sientes que sólo quieres viajar? ¿Buscas compañeros de viaje para descubrir el mundo? ¿Sueñas cada noche con  viajar a países lejanos?

Si la respuesta es sí a las tres preguntas… eres un nuevo hippy o, lo que es lo mismo, un Nomadizer. Si todavía no te lo crees, aquí tienes algunas razones más que justifican por qué estamos tan unidos al movimiento hippy de los 60-70.

¿Qué tenemos en común con los hippies?

• Los hippies dejaron huella en el mundo entero. Marcaron una era con su forma de vestir, de pensar, con su música y su espíritu nómada. Además, abanderaban un estilo de vida pacifista que sentó las bases del movimiento hippy.
• Eran unos incomprendidos. En aquella época, la sociedad esperaba otra cosa de estos jóvenes y, en muchos casos, fueron criticados y rechazados. Sus mayores no comprendían por qué se empecinaban en propagar su discurso crítico y pacifista para cambiar el mundo. En infinidad de ocasiones fueron tildados de idealistas.
• Viajaban mucho. Se consideraban nómadas y viajaban en grupo para descubrir nuevos lugares y disfrutar de la vida. Dormían en comunas y lo compartían todo. Sabían que lo mejor de la vida está en esas pequeñas cosas que nos hacen vivir intensamente. Se reunían para ver las puestas de Sol y se daban su tiempo para disfrutarlo. Valoraban lo intangible y sabían apreciar la vida.
• Trabajaban para sobrevivir. Muchos de estos viajes los realizaban donde había trabajo (en la mayoría de casos manufacturaban) y se quedaban hasta que la temporada finalizaba. Después, se desplazaban para empezar de nuevo.
• Eran años rebeldes, en donde las nuevas generaciones querían un mundo nuevo. Partían de la base de que la vida es corta y debían disfrutarla al máximo. ¡Fueron los precursores del Carpe Diem! 
• Se reunían en festivales de música donde propagaban el amor libre al son de la música. Escuchaban a Jim Morrison, Janis Joplin, Joe Coker, Jimi Hendrix, Led Zeppelin, Pink Floyd, etc.

Volvemos a Woodstock, Nomadizers

Justo en un festival de música, Woodstock, que reunió a miles de jóvenes, donde los hippies premonizaron su fin y realizaron un acto conocido como «La muerte del hippy«. Simularon el entierro del movimiento con un ataúd lleno de simbología propia de la contracultura.

Aunque estamos seguros de que esa muerte era temporal. Hemos resucitado renovados: ¡ahora podemos buscar compañeros de viaje para disfrutar de la vida! Recuperemos juntos el #hippyspirit.

Nomadizers, ¡volvemos a Woodstock!